Hace unos días, se descartó la posibilidad de ampliar la cátedra de sexualidad, que en este momento se dicta en bachillerato, a primaria y preescolar. Para el procurador Ordoñez, la razón es que “la Ley tiene que quedarse tal y como está pues dicha cátedra recibida a tan temprana edad podría inducir al inicio pronto de la vida sexual”. ¿Qué tan cierto es este argumento? ¿Qué gana o pierde Colombia al dejar de dictar una cátedra de sexualidad desde la primera infancia? ¿Qué sabe el procurador, aparte de lo que le dice su ideología dogmática y puritana, de la naturaleza del comportamiento humano? Quizás no ha revisado los datos relevantes provenientes de estudios científicos que refutan con datos (y no con especulación moralista) sus supuestas razones.
Sexualidad en los colegios
En Colombia, desde el 2007, se ha buscado educar a los menores de edad en sus derechos reproductivos, con el fin de capacitar y protegerlos. Esta protección no se limita a los embarazos y a enfermedades de transmisión sexual, sino a posibles casos de abuso sexual. Es clave el desarrollo de este programa, ya que la mayoría de los casos de abuso sexual se dan en niños entre los 5 y 14 años. Es decir, es mayor la incidencia en la infancia, que en la adolescencia.
Según Colombia Aprende, El Programa de Educación para la Sexualidad y Construcción de Ciudadanía es:
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una iniciativa del Ministerio de Educación Nacional y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), cuyo propósito es contribuir al fortalecimiento del sector educativo en el desarrollo de proyectos pedagógicos de educación para la sexualidad, con un enfoque de construcción de ciudadanía y ejercicio de los derechos humanos, sexuales y reproductivos.
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El fallo de la Corte Constitucional no tumbó el Programa de Educación para la Sexualidad y Construcción de Ciudadanía, simplemente la propuesta del colectivo “cero embarazos no deseados en adolescentes” de ampliar la cátedra de sexualidad a preescolar y primaria.
¿Qué pasará ahora que no se puede dictar una cátedra de sexualidad en preescolar y primaria?
La Ministra de Educación, Gina Parody, no estuvo de acuerdo con el fallo de la Corte Constitucional, ya que dice que la ley debe obedecerse, y en este caso, la ley dice que se debe dictar educación sexual desde la primera infancia.
Sin embargo, el viceministro de Educación Preescolar, Básica y Media aplaude el fallo, puesto que considera que en los niños, una clase magistral no es tan eficiente, sino que se debe dictar de manera transversal con otras materias.
[mk_blockquote align=”left”]Estamos en desacuerdo con establecer cátedras adicionales de sexualidad. La educación sexual debe ser parte de las otras materias, como biología y ciencias sociales[/mk_blockquote]
Al final del día, el ruido que generaron tanto el Procurador como el colectivo fue en vano, ya que en Colombia se venían dictando clases de educación sexual en preescolar y primaria, pero de manera transversal, y los estudios a nivel internacional muestran que es la mejor forma de hacerlo.
Embarazo adolescente alrededor del mundo
El desacuerdo de la Ministra frente al debate no es tanto por el fallo, sino por el concepto dado por el procurador Ordoñez, a quien calificó de “medieval”. La verdad es que las declaraciones de Ordoñez, quien asegura que enseñarles a los niños sobre sexualidad incitan a los niños a iniciar su vida sexual de manera precoz, no podrían estar más alejadas de la verdad.
En Suecia, en donde la educación sexual ha sido obligatoria para todos los estudiantes desde 1955, la tasa de embarazos en adolescentes es de 0.7% anual, comparada con un 19.5% en Colombia (fuente: Minsalud). Por supuesto, las clases no son el único factor relacionado con el embarazo adolescente. En un estudio realizado por Flórez en el 2005, se encontró que el nivel socioeconómico y el contexto socio-cultural también determinaban la fecundidad adolescente. Es por esto que varía tanto el porcentaje, incluso entre países desarrollados:
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País | Tasa de embarazo en adolescentes |
---|---|
Colombia | 19.5% |
Estados Unidos | 8.6% |
Australia | 4.4% |
Francia | 2.2% |
Alemania | 1.8% |
Suecia | 0.7% |
Fuente: UNICEF, 2001 (para países desarrollados. Para Colombia, Ministerio de Salud).
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Es por esto que tanto el colegio como la familia deben trabajar para educar a los niños en sexualidad. En estudios realizados por el Banco Mundial en diferentes países de Latinoamérica, se encontró que los estudiantes no aplicaban los métodos anticonceptivos acerca de los cuales aprendieron en el colegio, por sentir vergüenza de comprar dispositivos como condones o pastillas anticonceptivas. Este comportamiento se replica aún en países desarrollados como Nueva Zelanda, donde los estudiantes sentían no haber aprendido mucho de los programas del colegio, ya que al momento de tener relaciones, les faltaban elementos de negociación, como cómo convencer a su pareja de usar un condón, o preguntarle si tiene una enfermedad de transmisión sexual (Abel & Fitzgerald, 2006).
¿Qué estrategias están tomando los colegios de Bogotá?
Muchos colegios de Bogotá han cambiado el discurso y la forma de enseñar sexualidad. De hecho, en la mayoría de los colegios Éccole!, enseñan clases de afectividad, no de sexualidad. Es importante diferenciar las dos, ya que la primera se centra en todo tipo de relaciones, no simplemente las sexuales. Al enseñarle a los niños a reconocer desde pequeños qué tipo de interacciones son apropiadas e inapropiadas, es más fácil que se protejan contra abuso sexual. Este es el caso del Gimnasio Santa Ana, en donde les dan a las niñas un apoyo afectivo para la vida, fortaleciéndolas en autonomía, resolución de conflictos, y finalmente, educación en sexualidad.
Una de las quejas que presentaban los estudiantes en Nueva Zelanda a quienes se les preguntó sobre la efectividad de los programas de educación sexual, era que los programas no tenían en cuenta el nivel de interés o experiencia que tenían ellos en el tema. Así, para los más experimentados, la clase se volvía repetitiva, y para los abstinentes, estaba fuera de contexto. Una forma de abarcar esto es por medio de profundizaciones en la materia, para que aquellos que tengan un mayor interés en el tema, puedan profundizar su conocimiento. En el Colegio Nueva Granada, en High School (9th-12th grade), los estudiantes pueden ver una clase denominada “Advanced Health and Peer Education” la cual toca temas como los aspectos de la salud relacionados con la sexualidad, entre otros.
Colegios como el San Diego, trabajan de conjunto con Red PaPaz. Esta organización tiene un programa denominado Escudos del Alma, donde trabajan con especialistas en el tema (ginecólogos, psicólogos), para capacitar a los estudiantes en prevención del embarazo y de enfermedades de transmisión sexual.
En algunos colegios masculinos y femeninos, se hacen talleres de educación sexual en conjunto con colegios del género opuesto. Este es el caso del Gimnasio Campestre, en donde las sesiones se hacen con niñas del Marymount, Santa Francisca Romana o Santa María.
¿Qué papel juegan los padres en la enseñanza de la sexualidad?
El fácil acceso a la tecnología permite que los niños tengan contacto con información que puede confundirlos, si no se guía de manera adecuada. Una alternativa a este acceso a información es fomentar el uso del buscador Kiddle como alternativa a Google, el cual filtra palabras inadecuadas. Sin embargo, tampoco les da herramientas para responder sus dudas, ya que no les da ningún tipo de resultado, ni siquiera aquel que es apto para su edad.
Dado que el contexto social juega un papel importante, es clave que los padres tengan un diálogo constante con sus hijos. El Gimnasio Moderno recomienda la mejor forma de hacerlo; sin temor y de manera directa, sin usar diminutivos, y hacerlo de manera progresiva, cuando vayan surgiendo las dudas.
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